martes, 12 de octubre de 2010

RAYO DORADO


Este segundo rayo, representa la inteligencia y sabiduría infinita, latente en toda manifestación de vida. Es el poder que guía su evolución.

Esta inteligencia infinita conforma el patrón con el cual la pequeña semilla, luego de germinar, precipita el enorme árbol de la sabiduría que rige y genera las leyes de la creación. Guía a cada átomo para que conformen las moléculas que manifiestan los cuatro elementos en el plano físico tridimensional.

Este divino rayo enfoca la sabiduría divina para que cada átomo, molécula y célula conformen los distintos órganos de los vehículos físicos de todos los hijos del altísimo, encarnados aquí en la Tierra.

Este rayo de iluminación y comprensión confiere a quien lo invoca una fuerte inspiración en todo tipo de manifestación artística. Es el rayo que guía a los maestros, estudiantes, científicos e inventores, iluminándolos para que a través del intelecto, pueda concretarse en la Tierra, toda la tecnología necesaria para el desarrollo y la evolución humana.

Desde nuestro logos planetario y a través del arcángel Jofiel se irradia el rayo dorado, que durante el día lunes tiene su mayor poder.

La naturaleza conduce al hombre, por medio de la experiencia, a mejorar todo aquello que inventa o realiza.

El mundo nos acerca a lo omnisciente.

Al invocar este rayo de la sabiduría infinita comprendemos que el hombre no domina las leyes de la naturaleza, sino que se asocia a ellas.

Existe una cooperación entre todos los reinos (mineral, vegetal, animal) que buscan el bienestar común.

El mundo nos familiariza con la naturaleza de Dios, haciéndonos semejantes a El.

Este rayo brinda también la capacidad de compartir la enseñanza espiritual con otros, para que la luz del Padre ilumine el sendero del hombre.