martes, 7 de diciembre de 2010

¡ VIBRA! .-

(Por Julio Andrés Pagano)

Vibra

Abrí todos tus sentidos. Advertí este pulsar. Es un enérgico destello que te ayuda a recordar, avivando en tu llama interna la inmaculada esencia sagrada que transforma la materia. Sentí. Sos luz manifestando en la Tierra la vibración del amor. Alentá. Tu valiente corazón despierta al Ser Humano de su sueño en la inconsciencia, y lo incita a rememorar que sus dones deben esparcirse para enaltecer y embellecer el jardín de la existencia. No te detengas. Vibrá. Vibrá.

Vinimos a despertar latiendo. Vibrá. Retornamos a transformar sintiendo. Vibrá. Estamos aquí para mostrar aquellos caminos que conducen al corazón, sin entrar en cuestiones de dogmas o viejas estructuras que pretenden dividir lo que siempre estuvo unido. Somos la campana que anuncia el cambio. Vibrá. Tu radiante espíritu guerrero emite un particular sonido que activa y moviliza a vibrar conscientemente. No estás solo. Una legión de hermanos viene alumbrando.

El fervor de estas palabras te anima a continuar. La fuerza de esta sutil energía te impulsa a no aflojar. Potencialmente las semillas llevan dentro una planta, pero si no se abren para nutrirse de la luz del Sol, las plantas no crecen. Vibrá. Otros seres deben activar su corazón y florecer, para trascender la ilusión que los mantuvo presos de instintos primarios. Vibrá. Que tu voz los fortalezca en la fe, y los estimule a realizar, con amor y sabiduría, sus anhelos más profundos.

Perdidas en el laberinto de la mente, verás a muchas personas implorando auxilio. Ayudalas a sentir. Ayudalas a descubrir la eterna luz que llevan dentro. Vibrá. Que contemplen tus manos libres de cadenas y anhelen moverse en libertad. Vibrá. Que tu franca sonrisa les recuerde que es hora de entrar al corazón, para no quedar sofocados entre llantos y quejas. Vibrá. Infundí coraje. Irradiá pasión. Fuiste llamado a humanizar con maestría, empleando formas sencillas.

En tu peregrinar vivenciaste que subir y bajar, para luego regresar, a veces es extenuante. Sin embargo, bien sabés que es necesario inspirar para que otros salgan del valle de los lamentos y suban la montaña que los ayuda a sentir que existen nuevos horizontes. La humanidad está despertando. Ayudemos a cambiar la percepción. Vibremos. Mi corazón te abraza, mi alma te agradece y mi espíritu te honra. Seguí irradiando. Seguí inspirando. Volá bien alto. Vibrá. Vibrá.