El capitalismo salvaje degenera en canibalismo en China; televisora surcoreana revela que farmacéuticas fabrican pastillas con bebés muertos, vendidas para aumentar la energía.
No hay duda de que el modelo económico dominante lleva a muchas personas a perder la razón y hacer todo tipo de cosas que no se caracterizan precisamente por su gran virtud moral, pero este “capitalismo salvaje” quizás haya llegado a su punto más bajo en su descenso por los abismos de la humanidad, literalmente al punto del canibalismo.
El diario Internatinal Business Times de San Francisco reporta que la televisión surcoreana SBS, una de las principales de ese país, ha hecho un documental en el que acusa a compañías farmacéuticas chinas de fabricar con bebés muertos pastillas para aumentar la energía, abriendo el mercado de la “medicina gore“.
Esta perturbadora acusación está basada en una creciente demanda por estas pastillas en Corea del Sur y un análisis realizado por esta televisora del contenido de las cápsulas.
Según la SBS, los hospitales en China y las clínicas de aborto entregan los cuerpos de los bebés a las farmacéuticas en los casos en que el tipo de muerte hace que la madre no quiera preservar el cuerpo de su bebé.
Las farmacéuticas luego secan los cuerpos con microondas y los pulverizan para fabricar pastillas que son vendidas como suplementos energéticos
Exámenes de ADN revelaron que el 99% de las pastillas se componía de “humano”; encontraron también pelo y uñas y pudieron identificar el género del bebé.
Además de este abyecto negocio, se ha descubierto que existe un negocio vendiendo placenta humana como un “superalimento” en China.
En algunas prácticas de brujería y magia negra se considera que la sangre de un bebé tiene un poder especial. De manera quizás inadvertida, las farmacéuticas que procesan estas pastillas podrían estar haciendo brujería a gran escala, para las masas, sirviendo a un oscuro amo.