Un grupo de científicos sostiene que las personas que comen deprisa corren un riesgo varias veces mayor de padecer diabetes, alarmante pandemia a escala mundial, que quienes lo hacen a un ritmo normal.
Las personas que no se toman su debido tiempo para comer y lo hacen a ritmos vertiginosas desarrollan diabetes con una frecuencia 2,5 veces mayor, indica un informe realizado por especialistas de la Universidad Lituana de Ciencias de la Salud.
El estudio induce que los encuestados que admitieron comer más rápido que los demás tienen más posibilidades de desarrollar la diabetes tipo 2, la especie más común de la enfermedad, que se presenta en un 85% de todos los casos.
Sin embargo, todavía no queda claro que sea la causa. Es probable que la velocidad en la ingestión de alimentos acelera el proceso de acumulación de grasa que, a su vez, puede provocar la enfermedad.
Junto con la obesidad, existen otros factores de riesgo como el tabaquismo, las dietas daniñas para la salud o los factores hereditarios.
“La prevalencia de la diabetes tipo 2 aumenta a escala global y se convierte en una pandemia mundial”, comentó la doctora Lina Radzeviciene, una de los científicos que encabeza el grupo investigador.
La enfermedad “parece desarrollar la interacción entre el fondo genéticó susceptible y los factores del medio ambiente”, añadió.
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