lunes, 22 de noviembre de 2010

CRISTALOTERAPIA.-


La energía de la tierra es algo real y mensurable, de hecho, sabemos que nuestro planeta es un gigantesco imán con sus propias líneas de fuerza.
Ese poder universal, esta energía, está empezando a ser utilizada para la curación a través de muy diversas técnicas que pretenden canalizar y armonizar esa fuente inagotable de fuerza para recuperar la perdida salud de los seres humanos.

EL USO DE LAS PIEDRAS EN CRISTALOTERAPIA.
Las gemas actúan, por un lado, como catalizadores de la luz y el color con sus propios efectos cromoterápicos; pero también tienen vibraciones energéticas específicas que pueden usarse para situaciones concretas.En cualquier caso, para facilitar y potenciar el poder curativo de las piedras deben seguirse unas normas mínimas:- Las piedras deben lavarse con agua antes y después de su uso terapéutico.- Las sesiones deben ir precedidas de un tiempo de relajación y concentración que ayuden a dirigir la energía que se recibirá en la forma adecuada.- Durante la sesión (que puede durar desde un cuarto de hora hasta alrededor de una hora) el paciente debe estar acostado, con los ojos cerrados y mentalmente abiertos al poder de la piedra.

LAS TÉCNICAS
A efectos curativos, las piedras pueden utilizarse de muchas maneras:

1. Colocar diferentes piedras en el cuerpo, sobre los chakras correspondientes:

-Al primer chakra, vertebral y primario, corresponden piedras rojas como el rubí, el granate, coral, jaspe rojo, etc.
-En el segundo chakra se pondrán piedras anaranjadas como el ópalo de fuego, la cornalina o el jaspe anaranjado.
-El tercer chakra -sobre el plexo solar- pide piedras amarillas como el citrino, calcita amarilla, topacio o el ámbar.
-El cuarto, el del corazón, es armonía y creatividad y requiere piedras verdes o rosas (turmalina, malaquita, cuarzo rosa, aventurina, esmeralda o jade).
-Encima del quinto chakra -sobre la garganta- se deben poner piedras azules como el zafiro, el lapislázuli, el topacio o la sodalita, la turquesa.
-El tercer ojo -el sexto chakra- guarda afinidad con el índigo y se potencia con la proximidad de la azurita o el zafiro oscuro.
-Sobre la coronilla, cerca del chakra superior, deben ponerse piedras violetas, blancas, doradas como la amatista o la fluorita, citrino biterminado, cristal de roca, jaspe blanco.

2. Las piedras también pueden usarse pulverizadas, en preparados homeopáticos, elixires..

3. También se puede hacer un uso pasivo de ellos, colocándolos en lugares estratégicos del hogar o lugar del trabajo para que propaguen sus energías benéficas.
Los cristales sirven para emitir e incrementar la potencia de determinadas energías, se utilizan en cirugía microscópica por láser, en aparatos de ultrasonidos, en relojes, memorias de ordenadores, para controlar la radio-frecuencia de equipos electrónicos, condensadores para modificar la capacidad energética en circuitos y almacenar energía, transconductores para transmitir energía de un sistema a otro.

El cuarzo está reconocido por su habilidad para producir impulsos eléctricos, su campo energético tiene la habilidad de asociarse con la frecuencia precisa conocida como piezo electricidad, lo cual significa que genera electricidad por presión aplicada. Este tipo de electricidad es la misma en el cuerpo humano.Agua y Cuarzo, vibran en similar frecuencia que el cuerpo humano (que es 70% agua, silicio y oxigeno) y es similar al Cristal de Cuarzo en su estructura. Podemos notar la cercana relación y la armonía simpática entre el ser humano y el Cuarzo. El cristal mantiene un alto orden y estabiliza la composición de la estructura molecular del campo energético que rodea al ser humano, el cual es extremadamente complejo y variable. Cuando los campos de energía del cristal y el ser humano interactúan, los enfocados patrones de energía estabilizadores del cristal afectan equilibrando el campo magnético en nosotros.

El cuarzo, con su capacidad piezoeléctrica, transmite al ser humano iones negativos que equilibran las células de su organismo, evitando la degeneración de las mismas en la transmisión genética. Es bueno recordar que el cuarzo emite luz, al alcanzar primero en forma sutil nuestro campo magnético o aura, empieza a limpiarlo de impurezas y ondas negativas.
El cuarzo potencia la capacidad de autocuración que posee el ser humano a nivel energético, pero por eso no debemos dejar de consultar al médico en caso de alguna dolencia. Este cristal puede ayudarnos a regenerar tejidos u órganos enfermos, también problemas emocionales, desórdenes nerviosos, dolores, depresión, incluso puede proteger nuestra vida. Ofrece a nuestra mente serenidad y tranquilidad. Al llevarlo sobre el cuerpo, meditar con el, o incluso llevándolo en las manos, limpia todo lo negativo y amplia nuestro campo energético.

Cada una de estas piedras tienen una geometría, color y número de componentes que corresponden específicamente a cada uno de los Chakras. Cuando se coloca con una cadena al cuello o en el lugar que le corresponde , se produce su activación y equilibrio y en consecuencia la mejora de las funciones y órganos que regula cada Chakra.
Las piedras tienen sus Principios Energético, una piedra nunca se pierde, se va por falta de afinidad entre nosotros y ella; cuando una piedra se rompe es porque ha cogido alguna corriente negativa dirigida hacia nosotros y le ha servido de escudo protector. Puede colgarla o guardarla entre su ropa, como en el bolsillo etc., pero siempre trate de llevarla consigo.De esta forma se restablece el equilibrio interno estimulando la vuelta a la salud y preservando el organismo de futuras enfermedades.

Todas las gemas y minerales deben "limpiarse" de las energías negativas que tengan acumuladas. Para ello se lavaran con agua y sal, después con jabón o gel ph neutro y aclarar con agua.Dejar secar al sol o la luna llena durante dos o tres horas dependiendo del color de la gema.
Una vez realizado este proceso, no deberá dejar tocar la piedra a nadie excepto la persona poseedora (normalmente sólo tú puedes tocarla), para que no se mezclen otras energías.
Terapeutas: María Cicuéndez y Angel Sancho email:mariacicuendezluna@gmail.com
Madrid (España)

LOS CRISTALES DE CUARZO AL SERVICIO DE LA HUMANIDAD

Sus Múltiples Aplicaciones permiten la cirugía laser y las telecomunicaciones

Los cristales de cuarzo contribuyen al bienestar del ser humano pasando desapercibidos por la mayoría de la gente, que desconoce su aplicación a la cirugía microscópica con láser, electrónica, óptica, construcción, relojería y tecnología informática, entre otros usos, según Liz Simpson, autora del libro “Curación por los Cristales”.

Cada tarjeta inteligente contiene un pequeño chip de silicio, poco más ancho que un papel, que permite almacenar todo tipo de información sobre el poseedor de la tarjeta, desde límites de crédito y transacciones financieras hasta datos sobre la salud,” explica la periodista Liz Simpson. “Los chips de silicio se emplean para recibir, almacenar, amplificar y transmitir información en ordenadores, tarjetas de crédito, y en los programadores de aparatos domésticos”.

Por tanto, las propiedades aislantes y conductoras de los cristales favorecen su aplicación al avance tecnológico. En la década de los 40, investigadores científicos descubrieron que añadiendo átomos de otras sustancias a un cristal de cuarzo se creaba un aparato de transmisión, que fue utilizado en la radio para ampliar sus señales eléctricas, las cuales al ser recibidas por un cristal piezoeléctrico crearon el sonido. El transmisor abrió las puertas a la telecomunicación moderna, pudiendo eliminarse los tubos en la radio mediante la invención de este aparato.

En los libros “Triología de los Cristales”, la reconocida terapeuta norteamericana Katrina Raphaell nos conduce al maravilloso mundo de los cuarzos, a través de un viaje donde comparte con los lectores su experiencia personal en cuanto al descubrimiento, conocimiento y asimilación de los múltiples beneficios de estos regalos de la naturaleza. A través de la lectura es posible reconocer cómo los cuarzos han ido puliendo su capacidad para asimilar sus enseñanzas para ponerlas al alcance de la mano de muchos interesados.

En toda la bibliografía relacionada con cuarzos, cabe destacar un espacio reservado a las culturas ancestrales más importantes de la historia de la humanidad, desde las reconocidas como la egipcia, como las cuestionadas civilizaciones perdidas: Mu, Lemuria y Atlántida, para las que la práctica de curación con cristales tuvo una función muy importante en muchas tradiciones médicas. Remontando a su uso en el antiguo Egipto, hoy en día se siguen utilizando los bisturís de obsidiana para la cirugía, cardiaca principalmente, por la demostración de su precisión en el corte.

Las civilizaciones orientales también fueron conocedoras de las propiedades místicas y espirituales de las piedras destacando entre ellas China y Tíbet, donde se usaban no sólo como amuletos o agentes curativos, sino como ayuda en el desarrollo espiritual. La antigua civilización china, produjo exquisitas tallas de jade y esmeralda. Las piedras rojas, como el rubí y el granate se usaban para curar enfermedades y ser medio de protección contra el fuego y el mal tiempo. Las piedras azules y violetas, como la turquesa y la amatista, se asociaban con la fe y la virtud. Las piedras amarillas, como el topacio, se usaban para atraer la felicidad y la prosperidad. Y las piedras verdes, como el jade y la esmeralda, las usaban para la fertilidad y la fuerza.

En la Edad media los alquimistas demostraron la dureza del diamante contribuyendo con sus investigaciones a la base de la química actual, en sus aplicaciones para la sanación. No se puede hablar de los cuarzos, sin recordar a los Mayas, Incas, y chamanes nativo americanos, que diagnosticaban y trataban enfermedades a través de los cuarzos. Enseñanzas aplicadas en nuestros días por terapeutas especializados que han recibido la herencia de su sabiduría por tradición oral, en muchas ocasiones.

En la actualidad los terapeutas de cristaloterapia especializados en cristales de cuarzo los utilizan para sanar poniéndolos encima de la piel de acorde a su correspondencia con cada chakra, según los Vedas Hindúes, para visualizar o para programar intenciones. Esto se conseguiría meditando con un cristal de cuarzo transparente de unos 10cm aproximadamente, o realizando una parrilla o mandala de Reiki, que los estudiantes del sistema Usui Tradicional aprenden en el Nivel tres, de los cuatro niveles de esta práctica de relajación de origen japonés, utilizando ocho cuarzos transparentes para enviar energía a sus intenciones, siendo recomendado pedir por lo que sea más conveniente para cada Ser, en lugar de para lo que desea en concreto la persona.

La tierra es madre, y como tal se fragmenta en cristales de cuarzo para dar a cada uno de sus hijos lo que más necesita para su salud física y mental. Los cristales son regalos gestados y paridos en sus entrañas a través de los siglos. En su ADN cuentan con la herencia de la sabiduría ancestral del principio de los tiempos. Solo requieren respeto, cuidado, limpieza con agua con sal marina o jabón ph neutro y secado al sol o a la luna llena, entre otras técnicas de limpieza, ya que se cargan de todas las energías que nos sobran y nos entregan su pureza. En todas sus facetas, colores, texturas y lugar de origen merecen nuestro reconocimiento, no por ser los más raros de encontrar, son los más especiales. En la búsqueda de “lo estrambótico” se pierde muchas veces la belleza de la sencillez de lo que está a nuestro alcance…

MARIA CICUENDEZ