jueves, 29 de diciembre de 2011

Por qué comer crudivegano?

Los alimentos crudos son frescos, ricos y satisfacen el hambre más voraz. Nos proporcionan vitaminas que no necesitaremos buscar en ningún suplemento.

Si se comen alimentos naturales, crudos y bien combinados, éstos no dejarán residuos orgánicos. No hace falta que uno coma 100% crudo ni que sea vegetariano estricto para seguir La Dieta Original, el grado en que cada uno adopta la dieta es una decisión personal.

Puedes comer crudo durante el día y cenar cocinado, especialmente si necesitas tomar alimentos calientes. Se recomienda que si el alimento no es crudo, al menos sea biológico y tengas en cuenta las combinaciones que sugerimos.

cebollas

Por qué se excluyen la carne, el pescado, los lácteos y los huevos?

La carne es un alimento muerto que esconde grasa saturada y no posee fibra. Queda alojado en nuestro intestino grueso produciendo estreñimiento y putrefacción.

De este modo, podemos responsabilizarla de causas cáncer de colon y otras enfermedades de tipo digestivo. Además la carne, al igual que la leche, lleva hormonas y antibióticos que han sido dados a los animales. A nivel ecológico, la producción de carne es muy contaminante; y a nivel ético no tiene ninguna lógica matar un animal para comer un alimento cuyos nutrientes pueden ser obtenidos de otras fuentes, además de que para el ser humano es dañino su consumo.

El pescado de piscifactoría presenta los mismos inconvenientes que la carne, en cuanto a hormonas y químicos presentes en él. Si el pescado es de mar o de río, será superior su contenido en ácidos grasos omega 3; no obstante, el pescado sigue siendo un animal muerto y no posee fibra, por lo que también generará estreñimiento y putrefacción en el intestino grueso.

A nivel ético tampoco tiene justificación la muerte de un pez, pues el preciado omega 3 puede obtenerse de los aceites extraídos en frío de semillas, como por ejemplo el lino. Por otro lado, hay que tener presente que por desgracia hoy en día, los mares y ríos del planeta se encuentran muy contaminados.

Los lácteos pasteurizados presentan sus enzimas y vitaminas muertas. La caseína, que es la proteína que se encuentra presente en la leche de vaca, es muy difícil de digerir. Aunque tradicionalmente se ha recomendado la leche por su contenido en calcio, lo cierto en que hay alimentos como el tahini (crema de sésamo) o las algas, que poseen 10 veces más calcio que la leche.

Además, el calcio necesita de magnesio para ser absorbido por nuestro organismo. Precisamente es en las verduras de hoja verde, las algas y el tahini donde encontramos la proporción correcta de calcio y magnesio, pero no en la leche.

No hay que olvidarse que a las vacas se les administran hormonas de crecimiento y antibióticos, e incluso a las vacas productoras de lácteos orgánicos se les administra una pequeña cantidad de químicos. Por si fuera poco, la leche es uno de los alimentos que más moco producen de todos los que podemos consumir, y no es extraño relacionar el asma, los resfriados o las alergias con un consumo elevado de productos lácteos.

Por todo esto, los lácteos son alimentos que perjudican el sistema digestivo, respiratorio e inmunitario y, por tanto, la salud del ser humano.

Los huevos son alimentos muy concentrados que generan un estrés digestivo en el organismo y obligan al hígado a hacer un esfuerzo de metabolización. En todo caso, deberían consumirse siempre huevos de gallinas criadas en libertad y que se alimenten de grano y no de pienso. Y en el caso de los huevos, nunca crudos ni fritos, sino tomarlos cocidos, en tortilla o en revuelto.

El hierro no hemo es el hierro orgánico que nos proporcionan las verduras de hoja verde, los frutos secos y las frutas desecadas. Para mejorar su absorción necesita de vitamina C, que precisamente se encuentra en los alimentos crudos, pues la vitamina C es termosensible y muere en cuanto un alimento es cocinado.