Continuamente estamos hablando de los beneficios de las hierbas para nuestra salud, para enfermedades específicas, pero lo cierto es que nuestro cuerpo generalmente no sufre una sola alteración, sino que varias. Es ahí donde tenemos que saber qué hierbas nos podrán ayudar para nuestra condición individual. Muchas hierbas son de ayuda para una afección, pero están contraindicadas en otras, y a veces nosotros tenemos ambas alteraciones, por lo que debemos saber qué hierbas podemos usar.
Ginkgo biloba
Esta hierba ha sido ampliamente utilizada, desde hace mucho tiempo, para tratar alteraciones del sistema respiratorio, mejorar la memoria, el Alzheimer, combatir la esclerosis múltiple, así como para controlar la diabetes (ya que incrementa la producción de insulina) y para reducir la hipertensión arterial. Por ello, si tienes diabetes e hipertensión, enfermedades muy comunes en personas sobre los 50 años, puedes consumir ginkgo biloba y verás, además, otros beneficios.
Ginseng
El ginseng ha sido muy utilizado como un potente revitalizador, sobre todo para personas que están estresadas, convalecientes o que han sido sometidas a periodos de altas exigencias físicas. Sus efectos han sido comprobados, ya que incluso en suplementos vitamínicos se incluye, pero no sólo para eso puede servir, sino que también te ayuda a disminuir los niveles sanguíneos de glucosa y a manejar la presión sanguínea.
Hoja de arándano
El arándano es una fruta muy beneficiosa, además de tener un sabor muy especial, pero no sólo la fruta nos ayuda a tener una mejor salud, sino que las hojas de arándano también tienen propiedades terapéuticas. Las hojas pueden ser utilizadas como infusión de uso tópico para curar heridas de la piel, o pueden consumirse para obtener efectos antioxidantes, para proteger nuestro sistema nervioso. También son de ayuda para controlar la diabetes y la hipertensión, por lo que nos será muy útil cuando ya empecemos a tener algunas alteraciones propias de la edad.
Cuida tu salud
Si ya estás pisando los 50 años tendrás que cuidarte más, realizar chequeos más frecuente con tu médico y aprovechar las hierbas que nos ha dado la naturaleza para poder mantener nuestro cuerpo funcionando en óptimas condiciones.
Así podrás obtener efectos antienvejecimiento, con los antioxidantes que te puedan aportar las hierbas, y podrás controlar las alteraciones que se van produciendo con los años, como la diabetes y la hipertensión.
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