Por el Dr. David Jockers
Traducción: J.A. Beutelspacher
(NaturalNews) Mujeres en todo EEUU y otros países industrializados se les dice que someterse a momografías regularmente para detección temprana del cáncer de mama. Una mamografía es una radiografía de la mama para buscar crecimientos tumorales que de otra forma pasarían indetectables en un examen físico. Las radiografías utilizan los Rayos X para crear una imagen fotográfica. A pesar de los enormes descubrimientos e investgaciones, las mamografías han tenido fuerte oposición en muchos círculos de la comunidad médica y la medicina natural.
Esta oposición está relacionada con los peligros involucrados con la cantidad de la dañina radiación, las tasas de inexactitud y los costos económicos. Mamografías anuales son recomendadas para mujeres con edades arriba de los 50 años. En el 2001, funcionarios del sistema de salud de EEUU comenzaron a recomendar a las mujeres de más de 40 años a practicarse mamografías de forma regular. La revista médica Lancet escribió en Julio de 1995, que el “beneficio” de las mamografías es marginal, el daño ocasionado es sustancial y los gastos incurridos en ellas son enormes.
Muchos médicos tienen desconfianza de las mamografías debido a la enorme tasa de diagnósticos falso positivos. En un gran estudio llevado a cabo con más de 60,000 mujeres, los investigadores encontraron que el 70% de los tumores detectados, no eran realmente tumores. Estos resultados falso positivo crean una gran cantidad de estrés emocional en los pacientes y los familiares cercanos. Y aún peor, estos resultados llevan a practicar innecesarias biopsias invasivas. Las investigaciones han mostrado que el 70-80% de todas las mamografías positivas no mostraron la presencia de cáncer en los resultados derivados de las biopsias practicadas posteriormente.
Los falsos positives y las biopsias innecesarias pueden alterar dramáticamente la salud individual. El estrés emocional ocasionado por la creencia de tener un cáncer, cuando realmente no lo tienes, es suficiente para disparar la aceleración o aparición del cáncer en el cuerpo. Muchas mujeres han pasado por una innecesaria quimioterapia, radioterapia y mastectomías después de recibir los resultados falso positivos de una mamografía. Esto crea un enorme círculo de estrés económico, emocional y físico en las personas debido a las limitaciones de este tipo de pruebas.
Las mamografías de rutina exponen a las mujeres a una excepcionalmente alta cantidad de radiación ionizante. Las radiaciones ionizantes es algo a lo que todos estamos expuestos en la naturaleza y el cuerpo puede manejar cierta cantidad anualmente sin volverse riesgosa. Una serie de mamografías (2 RayosX en cada seno) es equivalente a 1000 dosis de la radiación para una radiografía de pecho o columna vertebral.
Debido a esta enorme cantidad de radiación, muchos expertos advierten que las mamografías de hecho incrementan el riesgo de cáncer de mama. El Dr. Rusell Blaylock, ha estimado que las mamografías anuales incrementan un 2% el riesgo de cáncer cada año. El Instituto Nacional del Cáncer, de EEUU, ha establecido que las mamografías son especialmente peligrosas para las mujeres jóvenes. De hecho, han establecido que podría causar 75 casos de cáncer por cada 15 identificados positivamente. Otros estudios han mostrado hasta un 52% de incremento en la mortalidad de cáncer de mama en mujeres jóvenes que se realizaban su chequeo anual.
La incidencia de ciertas formas de cáncer de mama, como carcinoma ductal in situ (DCIS) se ha incrementado hasta un 328% desde que se introdujo el estudio mamográfico. Investigaciones sobre el cáncer asimismo han encontrado un gen llamado oncogen AC que es muy sensible a la radiación. Mujeres que tienen este gen tienen un riesgo extraordinario al exponerse a una mamografía. Investigadores estiman que 10,000 portadoras de este gen, morirán de cáncer de mama cada año debido a las mamografías.
Las mamografías requieren que los senos de las pacientes sean oprimidos. Esta compresión es conocida como causante de liberar células cancerígenas en el torrente circulatorio, lo que incrementa grademente el riesgo de extensión de melanomas malignos. El Dr. Charles Simone, un asociado clínico en inmunología y farmacología en el Instituto Nacional del Cáncer, en EEUU, a abogado fuertemente en contra de las mamgrafías. El dice que, “las mamografías incrementan el riesgo de desarrollar cáncer de mama, y aumenta el riesgo de extender o metastacizar un crecimiento existente.
Acerca del Autor:
El Dr. David Jockers opera y es propietario del Centro de Salud Exodus (Exodus Health Center) en Kennesaw, Ga. El es un médico que maneja el sistema “Maximizando la Vida” El también es experto en tratamientos para perder peso, nutrición y ejercicios dirigidos, y práctica quiropráctica para correcciones estructurales. Para mayor información puede visitar www.exodushc.com
Dios te Bendice
Jesús Beutelspacher